En ocasiones
cuando empiezo a caminar
mis pensamientos
comienzan a divagar.
Después de
un rato de andar, divagando,
los
identifico y trato de atraparlos,
se desenrollan,
en sentido anárquico,
por aquí,
por allá, unos se escapan, no vuelven,
de tanto divagar
con ellos.
Aparecen y
atrapo los que más deseo.
A los
humanos nos pasa casi siempre lo mismo,
es parte de
nuestra naturaleza, es una nube blanca
circulando por
nuestra mente que provoca
sutileza,
suavidad, exquisitez,
que
tratamos de mostrar a otros,
los colores
de nuestros hilos intentando
que se
den cuenta.
Aquí en este
lugar,
en este
momento, que voy caminando,
divagando, veo
sus movimientos,
escucho su
voz, la de todo el día,
afuera y
dentro de mi cabeza, esa voz que
acompaña
mis pensamientos, sentimientos, emociones,
su sonrisa
gira con las nubes y
busco sus
canciones preferidas.
Entre acordes
está su voz
tarareando
la canción,
y desenrolla
mis pensamientos,
cual hilo expuesto de un tapiz,
unos van y
otros vienen como un simple arroyo
que avanza alegre con las primeras lluvias de mayo
hasta salir
de mi divagar por los caminos
que recorro
y me llevan hasta el río.
18 de mayo
de 2023
Foto
propia.