Sueños del Caribe

  Desde el barranco la miraba entera, manglares a cada lado, resguardándola, trozos de madera sacudidos al sol de la bahía. Por su vered...

  En el cielo raso de mi habitación hay unas estrellitas que, poco a poco, van perdiendo el brillo que acumulan durante el día o con la lámp...

El pueblo era lindo, alegre, lleno de luces de colores. Así lo pensaba yo antes. Tenía parques iluminados por donde se podía caminar y un ma...

  En un rancho a la orilla de la playa, pasando por Sally Peache, piso de arena tibia, techo de palma de coco, muebles de madera que c...

Al entrar al bar de Inés, el aire huele a barniz fresco y a aguardiente viejo. Las paredes de madera oscura tienen afiches clavados con tach...

  El hombre está solo, y consigo mismo va por allí. Camina en dirección al bosque que es suyo, nadie más que él ha sembrado los robles, ...

  Ha sido una mañana de esas pocas que nos regala el trópico húmedo.   El sol resplandecía en el camino, mojado por una llovizna b...

  Yo no sé decir bonito, pero te miro sentada en esa silla,  y me tiemblan los pliegues del alma. Sos como tarde buena para sembrar, morena ...