En los primeros años de la
fundación de Nueva Guinea, todos los colonos hacían la fiesta el mero día del 5
de Marzo.
Desde Managua venía gente del
gobierno a celebrar con los colonos, entre ellos: el doctor Rodolfo Mejía
Ubilla, presidente del IAN (Instituto Agrario de Nicaragua); don Oscar Montes,
subdirector del IAN; ingeniero Arpidio Tijerino, encargado de la carretera;
ingeniero Padilla Cubas, supervisor; ingeniero Pompilio Baca, encargado de
ganadería; ingeniero Saravia, encargado de cooperativismo y el doctor Arturo
Parajón, presidente de la comunidad Bautista y médico del hospital Bautista.
Se hacían grandes comelonas ese día, los evangélicos
iban a rendir cultos y los colonos católicos hacían fiestas de montaderas de
toros, cada colono daba su toro y hacían las barreras de caña de bambú al igual
que el palco. Para poder entrar al palco se pagaban 2 córdobas y el fondo que
se reunía era para pagar a los chicheros, a los toreros y para comprar los
galones de cususa. El resto de la barrera era bastante abierto para que miraran
la montadera los que no podían pagar la entrada.
Se organizaba una junta directiva
de fiesta. Ramiro Luna era el presidente de la fiesta; Pablo Urbina el
presidente de los toros; Santiago Leiva era el encargado de los campistos; Emérito
Arroliga y Felipe Arroliga eran los encargados de traer los toros y
controlarlos dentro de la barrera. Carlos López se destacó como el mejor
campisto y Julio Leiva como el mejor montado.
En ese tiempo nadie pagaba
impuestos, todas las mujeres vendían con alegría sopa de gallina y nacatamales.
No existía alcalde en esos primeros años, solamente un Consejo Agrario y un
administrador quienes eran las máximas autoridades de la comunidad. Con la
división política administrativa se nombran los alcaldes mediante los procesos
electorales con lo que la cultura y tradición de la algarabía que antes se hacía
se van perdiendo de forma paulatina; la actividad de las fiestas de aniversario
de fundación se sigue celebrando el 5 de marzo pero se han vuelto
mercantilistas, puros negocios y los colonos no son tomados en cuenta.
Fuente: Manuscritos de Víctor Ríos Obando, fundador de
Nueva Guinea.