sábado, 5 de diciembre de 2015

CUANDO EL CAMINO BRILLA CON LA LLUVIA


En una tarde lluviosa,
cuando el camino brilla con la lluvia,
caminé de prisa chapaleando lodo,
acosados mis pensamientos por problemas sin resolverse.
Miré hacia un lado, borrosa ente la brisa,
la luz acogedora de una tienda.

Vi a través de la ventana
estantes llenos de colores:
lucecitas parpadeando, arbolitos navideños,
cohetes y triquitraques, tambores,
cajas de chocolate, caramelos,
juguetes a montones.
Un desorden patético y barato.

Con ojos expectantes
mi infancia apresurada regresó.
Una vez más eran tesoros deseados.
Con codicia volví la mirada sobre las canicas,
los patines, la bicicleta, los aviones y balones.
Luego seguí por el camino bajo la lluvia.

En una tarde lluviosa,
cuando el camino brilla con la lluvia;
allí, en la ventana iluminada de la tienda,
dejé mi niñez”.


05/12/15