Antes, lo que no imaginaba, hoy admiro.
El tiempo no lo valoraba, se escapaba
en amaneceres y atardeceres descoloridos.
Antes, lo que no sentía, hoy duele.
El mínimo gesto se extinguía
sin sonrisas y rubores de alegría.
Antes corría de prisa, osadía.
Piedras y espinas,
engaños y mentiras.
Un maratón sin derrotero, desgastado.
Del antes aprendí lecciones.
Mentiras distantes reconozco,
la ocena a traición percibo.
Esquivas miradas hoy cautivo.
Con pasos lentos me levanto.
Andante del camino,
guerrero de la vida,
redescubriendo lo perdido.
Nueva Guinea.
23 de Junio 2014.
Día del Padre.
Foto: La vida y su abstracción de Sergio Orozco.
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