lunes, 11 de diciembre de 2023

EL PESCADOR

 



El pescador, con ilusión en el pecho,

deja a su amor en tierna despedida,

hacia el muelle camina, sueños en su barco estrecho.


Maniobra en el muelle, la barca en su partida,

levanta cuerdas, manos curtidas por la sal y el viento,

navega hacia la mar, su alma entera va rendida.

 

En la barra, el ancla cae con un lento movimiento,

entre la laguna y el mar, su espera se hace eterna,

enciende un cigarrillo, suspira, está contento.

 

La cuerda en el agua busca un buen pargo que gobierne,

las piedras y los arrecifes llenos de vida marina,

piensa en su futuro, en su joven esposa y su vientre.

 

El cordel corre y salta, como en danza cautiva,

jala y jala, en un juego de placer y de paciencia,

el peso alerta sus sentidos, la lucha es atractiva.

 

La gran presa llega con resistencia,

un mero majestuoso, castaño y rojizo.

Suspira, el pescador siente su recompensa.

 

En el barco, el mero aleteando halla su nuevo lecho,

regresa a casa con pargos y el gran trofeo,

cae la tarde; en sus brazos, su amor, su anhelo.

 

8/12/2023

Foto propia: Internet.

3 comentarios:

  1. Muy bueno Ronald. Me sentí en el mar. Sentí el nylon entre mis dedos. Y PENSÉ en un buen filete de MERO

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    1. Mucho gusto me da que te hayas transportado a la mar, tener la cuerda entre tus manos y pensar en el filete de Mero. Gracias por el comentario y te invito a visitar y seguir la página de Sueños del Caribe en Facebook. Saludos.

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  2. Me sentia ya yendo por la barra .

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