Como
todos los días, hoy a las seis de la mañana, encendí la radio para sintonizar los
102.5 de la frecuencia modulada de Radio Manantial. Lo hice para informarme de
las actividades que han programado para celebrar sus 21 años de existencia y,
cuando me di cuenta que tenían abiertos los micrófonos para que su audiencia llamara,
hice el intento pero el bip, bib, bip del teléfono ocupado no me permitió felicitarles
y por eso escribo sobre ello.
Radio
Manantial es la radio de todos y todas. Es la radio comunitaria de Nueva
Guinea, y lo es no porque se llama de esa manera, ni porque funciona bajo la lógica
de una cooperativa de comunicación. Es
comunitaria, es de todos, porque articula la participación de las personas que
la conforman, porque articula a su vasta audiencia frente a la problemática que
los aqueja: a las amas de casa, al vendedor ambulante, al comerciante, al
barbero, al taxista, al campesino, al pastor y al sacerdote, a los jóvenes, a
los maestros, a todos los habitantes del casco urbano, de las comarcas y las colonias
de Nueva Guinea.
Y
con ellos ha estado a su lado estos 21 años, ha dicho presente en las
desgracias familiares y en los desastres naturales promoviendo la solidaridad
de las personas con “hablatones”, promoviendo la cultura y el desarrollo de los
artistas locales, denunciando el atropello a los derechos humanos por parte de
los poderosos. Radio Manantial ha sido gestora en la apertura de nuevos
espacios de participación ciudadana, hasta ahora negados por los grandes
monopolios de comunicación. He allí su valor, su razón de ser, es la radio
hecha por las misma comunidad para la comunidad.
La
sociedad de Nueva Guinea tiene la obligación de apropiarse de este espacio
comunitario frente a la embestida de medios extraños y tiene la responsabilidad
de convertirla, aún más, en un escenario para la verdadera expresión democrática
ya que es un lugar para que las comunidades se reconozcan en su diversidad y
hagan radio a su manera, con sus recursos técnicos y económicos, con su
organización, y lo que es más importante, a través de su propia óptica de los
problemas que los aquejan, con su propia agenda, con sus deseos y aspiraciones
para construir la Nueva Guinea de todos y todas.
La
radio Manantial debe ser más que el gestor del servicio y la comunidad su
destinatario, lo que significa que ella es mucho más que otro espacio, es un
medio para que estemos juntos, para re-conocernos frente al otro que piensa
distinto, para intercambiar lo que somos, lo que queremos, para darle rienda
suelta a nuestra creatividad, para apoyarnos en la búsqueda de fines comunes,
para ser más solidarios, más autóctonos, para favorecer el desarrollo local
autentico y la convivencia pacífica y, en última instancia, para ser más Nuevaguineenses.
¡Viva
la Radio Comunitaria!
¡Viva
Radio Manantial!
24
de Julio de 2015.